Cada vez más se apuesta por el uso urbano de los patinetes y las bicicletas eléctricas. Principalmente, ha habido un auge en las compras de estos productos durante las fases de desescalada del estado de alarma. Se están utilizando como alternativa a los medios de transporte públicos para evitar aglomeraciones, por el miedo a contagios y rebrotes de la pandemia del Covid-19, ya que las personas quieren acudir a sus puestos de trabajo con una mayor seguridad.
Y es que, además, como veremos a continuación, la bicicleta eléctrica es una opción con múltiples ventajas. Es una forma limpia de movilidad, ayuda a reducir la contaminación y a mejorar la calidad del aire. Cada vez son más las personas que están concienciadas con la sostenibilidad. No supone problemas de aparcamiento. Con el buen tiempo y el fin de las restricciones de movilidad, apetece aún más realizar ejercicio y actividades al aire libre, aunque el esfuerzo de pedalear, sobre todo en las cuestas, con una e-bike es menor que con una bici estándar.
Actualmente, algunos países de Europa están tratando de impulsar la movilidad eléctrica otorgando ayudas y bonificaciones a los consumidores para la compra de estos vehículos. Como por ejemplo en España, la Comunidad de Madrid, que ya ha propuesto adoptar medidas para volver a la normalidad lo antes posible y de forma sostenible. Así, destinará 2,5 millones de euros en ayudas para la compra de vehículos eléctricos de movilidad personal, tales como patinetes, bicicletas, motocicletas,…
Y, ¿cuánto cuesta recargar la batería?
Este tema preocupa a muchas personas a la hora de decidir si comprarse o no una bici eléctrica. Para calcularlo, hay que tener en cuenta varios aspectos, entre otros, cabe destacar la capacidad de la batería (Wh) y el precio de la electricidad.
Hay que tener en cuenta también el tiempo de carga de cada batería y cuantas veces se cargará a la semana, dependiendo del uso que vayamos a darle y de la autonomía de la bicicleta.
Veamos un ejemplo de cómo se calcula lo que costaría una recarga de una bici eléctrica con una batería de 624 Wh con un motor de 250 W, que da una autonomía media de 60 Km.
- Primero, transformamos a kilovatios hora la capacidad de la batería:
-
624 Wh/1000 = 0,624 kWh
- Y, después, lo multiplicamos por el precio medio de la luz en España para consumidores domésticos que, incluidos ya los impuestos, es de 0,2403 € (fuente Eurostat).
Por tanto, el coste de cada recarga sería:
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0,624 kWh * 0,2403 €/kWh = 0,1499 €
Es decir, cada recarga de la bici costaría 15 céntimos de euro y te puede permitir recorrer unos 60 Km. Si usas la bici para ir a trabajar, ocio y deporte, supongamos que recorrerás al día unos 13 Km, es decir, unos 5.000 Km al año.
| 0,1499 € coste recarga 60 Km de autonomía
13 Km/día 5.000 Km/año recorridos (0,1499 € * 5.000 Km) / 60 Km = 12,4916 €/año |
Por tanto, cargar la bicicleta eléctrica te costaría menos de 13 euros al año.
Mucho más económico que el gasto del uso del coche u otros vehículos convencionales.
Para tratar de abaratar el coste de cada recarga, así como para obtener un ahorro mensual en la factura de electricidad, conviene comparar precios entre las distintas comercializadoras, para contratar el suministro eléctrico con aquella que ofrezca la mejor tarifa. Para facilitarnos esta tarea, podemos subir la última factura de luz que tengamos al comparador de Watiofy . Una herramienta gratuita y que, sin compromiso, compara más de 200 tarifas de energía del mercado libre de diferentes comercializadoras y ofrece, en tan solo unos segundos, la recomendación de la tarifa ideal que más se ajusta a las necesidades de cada usuario.
Además, Watiofy, resuelve cualquier duda que pueda tener el consumidor acerca de la factura o del sector energético y le asesora sobre qué potencia o qué tipo de tarifa contratar. Por ejemplo, si el usuario pretende hacer un mayor consumo eléctrico por las noches con una recarga habitual de la bici nocturna, la recomendación sería contratar una tarifa con discriminación horaria.
Es importante también saber, antes de comprarse una bicicleta eléctrica que, si el motor de la bici supera los 250 W o los 25 Km/h de velocidad, se considera un ciclomotor. Lo que obliga a matricular el vehículo, contratar un seguro y tener licencia para conducirla.
