Es posible que haya oído muchas veces que los acontecimientos históricos influyen en el mercado bursátil actual. Sin embargo, no siempre se dice exactamente cómo y por qué ocurre esto y cómo entenderlo. Vamos a intentar hacerlo.
Hay una idea muy interesante que se puede aplicar a cualquier ámbito de la vida. Para entender el presente y tratar de averiguar el futuro, es necesario conocer el pasado.
No podemos entender lo que ocurre hoy si no tenemos una lectura lo más clara posible del pasado. Aplicados al mercado de valores, algunos temas pueden hacernos comprender mucho mejor cómo comportarnos en situaciones similares a las que estamos viviendo actualmente.
Lecciones de la historia en la bolsa
Lo primero que hay que tener en cuenta es que cuando hablamos de la bolsa estamos hablando de muchos mercados diferentes en los que interactúan millones de inversores.
Por ejemplo, en Estados Unidos, podemos hablar de la Bolsa de Nueva York o del NASDAQ. Pero también podríamos hablar de otras grandes bolsas internacionales como la de Tokio, Londres, Frankfurt… Y decenas de otros mercados en todo el mundo.
Es importante entender esto como una primera lección porque, aunque los mercados están interconectados, no todos se ven afectados de la misma manera por un evento. Por ejemplo, la pandemia de coronavirus ha afectado a todos los mercados, pero a medida que algunos países salían de la zona de mayor riesgo, una mayor parte de la economía se recuperaba. Estos mercados sufrieron menos que los de países aún más comprometidos.
Otra lección importante a tener en cuenta es que las acciones, dentro de los mercados bursátiles, suben y bajan de precio y se ven afectadas por las tendencias, las situaciones geopolíticas o los acontecimientos sanitarios como las pandemias.
Al mismo tiempo, otra lección importante es que los mercados de valores tienen un comportamiento cíclico. Este comportamiento cíclico da lugar a patrones repetitivos que, más o menos, pueden estudiarse y que se repiten durante largos periodos. Esto no significa que se puedan predecir con exactitud; cada patrón puede tener un comportamiento diferente en términos de duración, intensidad, etc. Sin embargo, se pueden determinar algunos ciclos.
Algunas lecciones históricas del mercado bursátil estadounidense
La Gran Depresión de 1929 suele tomarse como punto de partida para el análisis histórico moderno del mercado bursátil estadounidense.
Utilizando esta medida, el mercado bursátil estadounidense se ha hundido más de 10 veces desde los años 20 (en realidad 11 veces).
La crisis de 1929 es probablemente una de las crisis económicas más graves que ha conocido el mundo moderno. En esa crisis, uno de los principales indicadores del mercado, el S&P 500, perdió el 86% de su valor. Para hacernos una idea de la importancia de aquella crisis, este índice tardaría 35 años en recuperar su máximo anterior a la depresión de 1929.
Las recesiones posteriores han sido más cortas. La que comenzó en 2007 con la burbuja inmobiliaria es probablemente una de las más duras de los tiempos modernos, en el siglo XXI. No se puede comparar, sobre todo porque la depresión del 29 siguió a un acontecimiento de la magnitud de la Segunda Guerra Mundial.
También hemos sido testigos de colapsos mucho más cortos en los últimos 100 años, en algunos casos incluso de menos de un año.
¿Pueden interpretarse los ciclos históricos de los mercados bursátiles?
Es una gran tentación tratar de entender exactamente cómo se comportará el mercado basándose en el análisis del pasado. Sin embargo, esto no es muy fácil, es prácticamente imposible.
Hay que tener en cuenta que, aunque el comportamiento de los mercados de valores es cíclico, no podemos determinar el grado en que se producirá. Del mismo modo que no podemos predecir que un movimiento alcista se mantendrá durante un tiempo determinado, tampoco podemos predecir que un ciclo bajista en la bolsa alcanzará una pérdida o un límite temporal concreto.
Por lo tanto, a corto plazo no es en absoluto útil tratar de hacer tales interpretaciones. El largo plazo es otra cuestión. A largo plazo, se ha demostrado que los mercados de valores se recuperan. Las inversiones diversificadas a largo plazo tienen tendencias al alza incluso en largos periodos de recesión.
¿Qué puedo hacer si tengo miedo de interpretar los acontecimientos históricos en la bolsa?
Es normal tener cierto temor a revisar la historia bursátil. A nadie le gusta entrar en un ciclo bajista y sufrir la pérdida de valor de sus acciones. Algunas conclusiones que podría intentar aplicar en este caso son las siguientes:
La historia nos ha enseñado que los mercados bursátiles tienen ciclos en los que se alternan momentos de valor a la baja con momentos de valor al alza. No hay una única tendencia, las bolsas pierden y ganan. Las medias a largo plazo tienden a una tendencia al alza.
Incluso en periodos bajistas, se puede tener la perspectiva de obtener beneficios. Muchos grandes inversores son especialistas en encontrar momentos bajos de valor para aumentar el valor de sus acciones a lo largo del tiempo.