El Plan de Incentivos para Vehículos Eficientes (PIVE) va a alcanzar su tercera convocatoria, según conocimos en boca de la vicepresidenta del gobierno el pasado viernes 19, en una declaración en la que se debería advertir del cercano lanzamiento de una nueva convocatoria con la cual, realmente se vendría a reforzar la continuidad de este plan de incentivos para vehículos eficientes conocido en la actualidad como PIVE y qué pasaría en esta nueva convocatoria a denominarse PIVEIII
En las próximas semanas conoceremos las bases de regulación de este nuevo PIVEIII que de entrada, ya conocemos, se presenta con un presupuesto que se colocan los 70 millones de euros.
Partimos del análisis de la anterior aplicación del plan (PIVEII) que presentó una recaudación en el entorno de los 184 millones de euros creando una demanda a sumar próxima a los 50.000 vehículos. Por ello, se prevé que a los 70.000 vehículos englobados en la subvención del PIVEIII habrá que sumarle al menos una demanda añadida cercana a los 25.000 vehículos.
El impacto económico previsto por esta nueva convocatoria del plan de incentivos para vehículos eficientes, puede superar los 800 millones de euros según datos aportados por la asociación nacional de fabricantes de automóviles y camiones, entre las que, en adición, la recaudación de impuestos, que englobaría tanto el impuesto al valor añadido como los impuestos de matriculación, podría llegar a suponer unos 200 millones de euros.
Otro de los objetivos de estos planes de incentivo, es obviamente el apoyo a la eficiencia que en el propio nombre del plan se inserta, para ello, se prevé un impacto en la reducción de niveles de emisiones que podía llegar a superar las 116.000 toneladas anuales, así como, desde el punto de vista de la sostenibilidad, se plantea una posible reducción de los consumos de combustibles que podría llegar a cuantificarse en unos 30 millones de litros, lo que traducido a ahorro de dinero podría suponer cerca de 40 millones de euros de ahorro.
